El Cáncer de Garganta, ¿relacionado con las relaciones sexuales?
Los cánceres de cabeza y cuello habitualmente se han relacionado con hábitos tóxicos como el tabaco y el alcohol. En los últimos años, el virus del papiloma humano (VPH) ha demostrado ser un agente relacionado con el cáncer de garganta.
Mientras que, en la última década, los cánceres de la laringe y hipofaringe han presentado una disminución de su incidencia, como consecuencia de los cambios en hábitos como el consumo de tabaco y alcohol. En cambio, el cáncer de garganta (orofaringe) ha presentado un aumento de incidencia debido a la influencia del VPH.
Actualmente, en nuestra zona, se calcula que el 30% de los cánceres de garganta están provocados por la acción de este virus, mientras que en zonas como Norte América o el norte de Europa se ha visto implicado hasta en el 80% de estos tumores.
Habitualmente, este virus de transmisión sexual da lesiones genitales y se ha relacionado con el cáncer de cérvix en mujeres. Se calcula que este virus podría estar presente en un 10% de los hombres y 4% de las mujeres, aunque el subtipo más relacionado con el cáncer (VPH16) únicamente estaría presente en el 1% de los pacientes.
Desconocemos el motivo por el cual hay personas expuestas al virus que no presentan lesiones y en cambio otras desarrollan un cáncer años después de la exposición.
¿Se puede prevenir?
Al ser una infección de transmisión sexual, el único factor de riesgo es el número de parejas sexuales. Las medidas recomendadas para evitar esta infección son las siguientes:
- Métodos anticonceptivos de barrera.
- Vacunación: Actualmente se recomienda la vacunación para niños y niñas a los 11-12 años (Asociación Española de Pediatría), aunque está financiada únicamente para niñas.
- Controles habituales por su ORL y exploración de la vía aerodigestiva alta.
- Controles regulares por su odontólogo: El mantenimiento de una buena higiene dental ayuda a evitar la aparición de lesiones inflamatorias.
- Controles ginecológicos habituales y screening del VPH.
- Evitar el tabaco y el alcohol: Estos factores siguen siendo factores muy influyentes en el cáncer de garganta, que empeoran el pronóstico de estos pacientes además de disminuir la respuesta a los tratamientos.
¿Qué sintomatología puedo notar?
Los cánceres de cabeza y cuello, y el de garganta en particular, pueden pasar desapercibidos durante tiempo, por esta razón se debe prestar especial atención si aparecen estos síntomas:
- Lesión o masa abultada en la boca, paladar o zona amigdalar.
- Tumoración o bulto en el cuello.
- Dolor o dificultad para tragar los alimentos.
- Cambio en la voz.
- Saliva manchada con sangre.
- Dolor en el oído con la deglución.
- Nueva aparición de ronquidos sin ganancia de peso.
- Pérdida de peso.
¿Es tratable?
Este tipo de lesiones responden a tratamientos basados en cirugía, quimioterapia y radioterapia. Según el estadio del tumor, se realiza un único tratamiento o una combinación de estos. La cirugía consiste en la eliminación de tumor local y en muchos casos de los ganglios linfáticos cervicales en riesgo.
En los últimos años, los esfuerzos de estas cirugías se han centrado en la disminución de las secuelas del tratamiento en una región anatómica con una importancia capital para la función deglutoria, comunicativa verbal y estética.
Los abordajes quirúrgicos para este tipo de lesiones en la garganta han progresado gracias a la implementación de la cirugía robótica transoral. Este tipo de técnicas permiten eliminar el tumor sin incisiones por fuera de la boca ni abrir los tejidos de la cara, hecho que mejora la recuperación de estos pacientes, así como disminuyen la necesidad de hospitalización.