Histerectomia por laparotomia
La histerectomía por laparotomía es un procedimiento quirúrgico mayor que consiste en la extirpación total o parcial del útero y tejidos anexos afectados de patología severa (benigna o maligna), mediante cirugía abierta.
En función de la patología a tratar, el ginecólogo decidirá el tipo de histerectomía que llevará a cabo:
- Parcial: se extirpa sólo la parte superior del útero (cuerpo).
- Total: extirpación completa del útero (cuerpo y cuello).
- Radical: se extirpa el útero al completo más la parte alta de la vagina y los ganglios y conductos linfáticos de alrededor.
- Radical con anexectomía: la misma resección que en la histerectomía radical más trompas de Falopio.
La histerectomía abdominal por laparotomía se lleva a cabo practicando una incisión vertical u horizontal (de 12 a 15 cm) en la parte inferior del abdomen. La decisión final sobre la vía de abordaje, la tomará el cirujano después de la valoración de cada caso en particular. A través de esta incisión se accede al interior de la cavidad abdominal, para llevar a cabo la resección de los órganos o tejidos a extirpar, liberándolos de ligamentos y vasos sanguíneos y evitando dañar las estructuras de alrededor. Una vez se lleva a cabo la extracción de los órganos o tejidos patológicos, se procede a cerrar la cavidad abdominal por planos, y finalmente la piel, todo ello con puntos de sutura.
La intervención se lleva a cabo con anestesia general y tiene una duración de entre 1 y 2 horas.
¿Cuándo está indicado?
Esta intervención está indicada cuando la paciente presenta patologías ginecológicas como:
- Benignas
Miomatosis uterina (tumores benignos en la pared del útero).
Endometriosis.
Prolapso uterino.
Hemorragias uterinas.
- Malignas
Cáncer de útero.
Cáncer de cérvix.
Cáncer de ovario.
Información de servicio
Antes (preparación)
Se le realizará un estudio preoperatorio y se le preguntará por los medicamentos que toma habitualmente, por si fuera necesario suspender temporalmente su administración.
Antes de la intervención, deberá seguir un protocolo de ayuno, higiene y/o toma de medicación que le será indicado por su cirujano.
No deberá llevar ningún objeto metálico durante la operación: anillos, pulseras, pendientes, piercings, etc.
Después (recuperación y resultados)
La cirugía requiero un ingreso hospitalario de 3 a 5 días. Durante las primeras 24 horas tras salir de quirófano, deberá llevar una sonda vesical. Para el post-operatorio, se le instaurará una pauta analgésica para disminuir el dolor y las molestias.
El periodo de recuperación total le llevará entre 6 y 8 semanas, pero se podrá reincorporar a la vida normal (sin esfuerzos) tras 2 o 3 semanas.
Equipamiento e instalaciones
- Quirófanos con flujo laminar
- Mesas quirúrgicas radiotransparentes
- Respiradores y carros de anestesia de última tecnología
- Pinzas selladoras Ligasure